Falta que Christian quiera…

Salvador Muñoz

Los Políticos 

La mayor parte de los puntos que hizo el alcalde de Tlacotalpan, Christian Romero Pérez, para responder a la Asociación Nacional de Ciudades Mexicanas Patrimonio Mundial (Ancmpm), están llenos de verdad, salvo por un ligero detalle: en ninguno contesta a las observaciones que realmente le hizo la Asociación por lo que deja en claro el alcalde que él está feliz con que La Perla del Papaloapan sea atractivo una vez al año con la Fiesta de la Candelaria y si bien le va, algunos días en las vacaciones de diciembre, para dejar de lado la idea de proyectarla como un destino turístico de flujo constante durante todo el año, los doce meses, los 365 días… un conformista, una visión corta, un presidente sin ambiciones… pero para con su pueblo.

Si bien extrañan las respuestas del alcalde porque el comunicado de Jorge Ortega González, director de la Ancmpm, era preciso en sus observaciones, pudiera uno entenderlo porque los yerros en que incurre a la hora de responder el edil, fueron los que se manejaron en algunos medios donde daban por hecho que Tlacotalpan perdía la categoría de Patrimonio, pero entonces se podría pensar dos cosas de Christian Romero Pérez:

1.- O no leyó el comunicado.

2.- Y si lo leyó, no entendió lo que leyó.

Aunque en una de ésas, dándole el beneficio de la duda así como un grado de perversidad (en el sentido político), podríamos decir que quizás lo interpretó a su antojo para entonces responder a su conveniencia.

Sólo así se podría entender el porqué Christian Romero aseguró en Comunicado Oficial sin folio, que Tlacotalpan no perdía su calidad de Patrimonio Cultural de la Humanidad por la suspensión de la Ancmpm cuando nunca se dijo esto… ¡por supuesto que no lo pierde! pero es una forma de engañar con la verdad.

Otra falacia es decir que los recursos provenientes de la secretaría de Cultura no dependen de la permanencia en alguna asociación… ¡claro que no! Otra mentira con la verdad, como igual es mentira que se haya suspendido a Tlacotalpan por no cubrir la cuota con la Asociación, que si bien es parte, es más relevante su falta de interés, de participación y coadyuvancia con la Ancmpm porque su desidia, de un modo u otro, afecta, ¿cómo? nomás como ejemplo: con el subejercicio de 15 mdp, cantidad que no invirtió en el 2018, y que quienes saben de administración, conocen los riesgos que implica la devolución de recursos a la federación, no sólo repercutió en Tlacotalpan por la ausencia de obra proyectada, sino que generó cuestionamientos, “pudiendo haber sido un factor en la reducción del presupuesto 2019 del programa en su conjunto”, cita Jorge Ortega González en comunicado.

Por cierto, hay que citar que este año, en el Presupuesto que envió el Ejecutivo Federal a la Cámara de Diputados, había desaparecido el programa de Apoyos a Ciudades Mexicanas Patrimonio Mundial y gracias a las gestiones conjuntas de todos los alcaldes (excepto Tlacotalpan) se logró rescatar. Efectivamente, el recurso no lo pierde, pero lo obtiene sin haber coadyuvado en las gestiones.

Ojalá que en lugar de falacias, la administración municipal de Tlacotalpan buscara proyectar a la Perla como un destino turístico constante y sonante, y no conformarse con serlo una vez al año cuando la ciudad tiene potencial para hacerlo… mas no así su alcalde. ¿Que no es ciudad capital como las otras y por eso recibe pocos recursos? También Orizaba no lo es y tampoco está catalogada como Patrimonio, pero se arriesgó, y sin más apoyo que el de una buena inversión y mucha ambición, está donde está. Tlacotalpan puede contar con el apoyo de la Asociación Nacional de Ciudades Mexicanas Patrimonio Mundial, con el del Gobierno estatal y si quiere, con el Federal, pero falta que Christian Romero quiera… quiera a Tlacotalpan.

smcainito@gmail.com