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    Carlos A. Villalobos Cortés

    Sin Tapujos

     

    En vísperas de un proceso electoral que de hecho ya ha dado inicio con la instalación del Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) hace un par de días, la participación de MORENA en los comicios del próximo año comienza a verse un tanto «comprometida» y es que es evidente que los acontecimientos que se suscitan a nivel nacional repercuten para bien o para mal al interior del país.
    En Veracruz habrán de renovarse el próximo años 212 alcaldías y el Congreso local amén de que en el plano nacional corresponde al Congreso Federal de San Lázaro su renovación.

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    Por ello los encargados de «palomear» las listas de hombres y mujeres que habrán de representarlos deberán realizar un minucioso análisis de sus mejores contendientes y es que tras los recientes acontecimientos en los que se ha visto envuelta la 4T; video escándalo del nuevo hermano incómodo Pío López Obrador, la salida de Víctor Toledo de la Secretaría del Medio Ambiente, las rabietas del diputado Gerardo Fernández Noroña (Pregunta Noroña: «¿Qué acuerdo oscuro tiene nuestro compañero Presidente con el PRI?») más las que se acumulen, resulta inevitable evitar el desgaste que el movimiento de transformación ofrecido por AMLO a sus seguidores está sufriendo. Por ello MORENA está urgido de mostrar sus mejores cartas. Apostar nuevamente al arrastre de Andrés Manuel López Obrador para obtener la victoria resulta bastante arriesgado y es que aún con la aceptación (alrededor del 50 por ciento) de la población, es preciso mencionar que la calificación del tabasqueño ha venido a la baja.
    Con diferentes condiciones a la elección del 2018 los próximos abanderados de MORENA deberán contar con su propio capital político, ofrecer al electorado un proyecto viable y propuestas que realmente beneficien a los diferentes sectores de la sociedad.
    ¿Quién para la alcaldía?
    A los nombres ya conocidos, Raymundo Andrade Rivera, Carmen Mora García o su hijo Rigoberto Amezcua Mora (dependiendo de la cuota de género) se suman los de Miguel Ángel Hernández Suárez (ex candidato a la alcaldía de Coatepec) y el empresario constructor Roberto Bonilla Gómez (ex suplente del diputado local del PRI Carlos Ernesto Hernández Hernández. De estas posibles cartas, políticamente hablando, es Miguel Ángel Hernández Suárez quien sale mejor librado al contar con mayor oficio político no solo por haber recorrido el municipio en más de una ocasión buscando el voto sino también por contar con la experiencia en la administración federal y municipal y gozar de simpatías tanto entre la población votante como al interior de varios institutos políticos aunque precisamente es esa experiencia en gobiernos emanados de Acción Nacional los que en determinado momento podrían ser mal vistos por algún sector de la militancia de MORENA. El mayor reto que enfrenta hoy Hernández Suárez es lograr convencer a quienes toman las decisiones que respaldado por la coalición MORENA-PT-PVEM sería el indiscutible rival a vencer.
    En el caso de Roberto Bonilla, su pasado político y cercanía con los ex goberndores priistas Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte de Ochoa podría terminar siendo el mayor lastre para su proyecto en pos de la alcaldía, sin embargo también hay que reconocer que su apellido y residencia en el lugar que lo vio nacer le concede simpatías en un buen sector de la población. En contraparte el hoy legislador local Raymundo Andrade Rivera cuenta con el mayor apoyo de la militancia, pero habrá que ver qué opinan los votantes tras su paso como legislador. Y es que si bien sus números en la elección anterior rumbo a la alcaldía son su mejor carta de presentación también resulta importante para la toma de decisiones su quehacer político por el palacio del encanto. No son pocas las voces que perciben que su estadía en el Congreso local ha sido con más pena que gloria, múltiples reclamos, de los que nos ocuparemos en próximas entregas, sobre su nula presencia en el distrito que le confió el voto es al momento su mayor pifia.
    Ese pobre desempeño como representante del distrito de Coatepec en el Congreso local pudiera jugarle las contras.
    En el supuesto de que la señora Carmen Mora García este interesada en participar por la alcaldía de Coatepec tendría que arrastrar bien el lápiz para ver si le alcanzan las cifras y es que al igual que el legislador local. La empresaria hotelera y de la tortilla ha brillado por su ausencia en un distrito eminentemente agropecuario que vio en la 4T la mejor opción para mejorar sus condiciones de vida sin embargo al día de hoy en el campo esa apuesta no se ha visto cumplida y ahí los diputados federales en su conjunto y en lo individual juegan un papel importante.
    Hablando del tema local el nombre de Jorge Ignacio Luna Hernández, regidor tercero de Coatepec, comienza a ganar terreno frente a otros suspirantes. Luna Hernández goza de buena aceptación al interior de MORENA sin embargo habría que ver cómo lo percibe la población en general y no solo el pequeño grupo que lo circunda fuera de su partido, máxime luego del sentir de algunos coatepecanos que consideran que Luna Hernández terminó doblegándose ante las presiones del alcalde Enrique Fernández. Otro nombre que llegó a sonar en su momento, fue el de la también regidora cuarta de Coatepec, Erika Liliana Muñiz Fano, sin embargo la propia regidora se encargó de desmentir alguna posible aspiración y es que quien impulsara fuertemente varios programas sociales desde su regiduría, aseguró a quien esto escribe que su compromiso es concluir el periodo por el que fue electa (4 años) por lo que al ser mujer de palabra cumpliría con esa encomienda.
    Quien debería estar tranquilo es Adrián González Naveda quien prácticamente viaja de «a muertito» rumbo a la diputación federal ya que esa posición la tiene en solitario a menos que resulte cierta la aspiración del peroteño Juan Manuel Velázquez Yunes quien amén de contar en su haber con cargos como la alcaldía de Perote, la diputación local y federal y más importante quizá, ligado familiarmente con el senador Ricardo Ahued Bardahuil. Así que mientras Juan Manuel no diga esta boca es mía Adrián González Naveda puede dormir tranquilo, ya si las condiciones se dan entonces si el político proveniente de la ciudad de México donde colaboró en el Grupo Parlamentario del PT en el SENADO de la República y avecindado desde hace unos años en la comunidad de Zoncuantla, deberá redoblar sus esfuerzos por construir en poco tiempo su propio camino político mismo que no llegó a concretar al frente de los programas sociales en el distrito de Coatepec.
    Como colofón de esta entrega diremos que si MORENA busca asegurar el triunfo en los próximos comicios deberá elegir con la cabeza y no ceder a las tentación de apostar al mismo discurso de combate a la corrupción, convocar a consultas públicas para la toma de decisiones trascendentales para el país y proponer en cambio una agenda propia que sí se empate con la agencia estatal o federal pero que no dependa al cien por ciento de lo que se dicte desde una oficina en la capital del estado o de la CDMX.
    Al día de hoy un nuevo escándalo empaña el de por sí cuestionable proyecto de gobierno de la 4 mismo que aunado a los videos comprometedores de Pío López, el perdón a Lozoya, la renuncia de Víctor Toledo y hasta el berrinche de Fernández Noroña por el «arribo» del PRI a la mesa Directiva de San Lázaro dejan claro que los jaloneos al interior de la 4T están de a peso.

    email. fotografolider@gmail.com

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