Miguel Ángel Gómez Ruiz
Contrapunto
El huracán “Otis”, que golpeó al estado de Guerrero y mayormente en Acapulco, dejo daños incalculables. De cierto modo, dejó una destrucción casi total. Hoteles, yates, lanchas de pescadores, negocios, viviendas, mercados, casi todo se fue al caño.
Y para echar sal a la herida, se palpó en su totalidad, la ineptitud de los tres niveles de gobierno. Primero, la alcaldesa de Acapulco, Abelina López, que salió a justificar los robos a negocios y no tuvo ni una palabra de aliento para los sobrevivientes que casi lo perdieron todo.
También, la ausencia de Evelyn Salgado, la gobernadora de Guerrero que en lugar de estar en un bunker durante la presencia del fenómeno, prefirió divertirse en las playas de Nayarit. Trató de justificar su ausencia tomándose fotos frente al Palacio de Gobierno, con calles limpias y como si nada hubiera pasado.
Y finalmente, el presidente López que hasta con esta tragedia, un huracán categoría 5, fue la víctima, como siempre de los ataques de los conservadores, presumió ser el segundo mandatario más votado, siguió atacando al Poder Judicial y sólo dedicó, tras el huracán, 15 minutos a la situación de Guerrero.
Después, a sabiendas de que no había paso por auto hacia Guerrero, partió en su camioneta blindada, se subió a un maltrecho vehículo militar, caminó por el lodo, viajó en una camioneta de redilas y aseguró que estuvo en Acapulco.
Pero no se puede mentir siempre o quizá sí, pero que la gente lo crea, esa ya es otra historia. Ha sido muy poca la ayuda que se ha entregado. Poca agua, poca comida y poca ropa. Toda es entregada por el Ejército y la Guardia Nacional, no, ellos aseguran que la ayuda no es politizada, aunque haya cientos de siervos de la nación. El caso es que la ayuda de la gente no llega y toda se la apropian, no, no crea que Martí Bátres está por allá, todo fue por orden del presidente López.
Inclusive, me reporta un compañero de medios que los siervos de la nación están entregando ayuda, a cambio de la credencial de elector y la promesa de que voten por Claudia Sheinbaum, a ese grado llega la mezquindad de esta administración y del partido que les cobija, Morena.
Tras el paso del huracán, muchas historias de vida y sin que haya intervenido –gracias a Dios- este gobierno. Una conferencista xalapeña que se hospedó junto con su hijo a las 11 de la noche, casi a nada que se presentara el huracán y que permaneció incomunicada, pero que ya está en Xalapa con su hijo y el resto de su familia. Otros amigos que con apenas unas horas para que hiciera acto de presencia el meteoro, se marcharon de allí con pocas cosas y que llegaron a la Ciudad de México, completamente a salvo.
La historia de tantos y tantos que han visto cómo se levantan y que casi sin alimentos, sin presencia del gobierno, han compartido lo poco que tienen para que, amigos y vecinos coman. Otros han prestado su espacio para que duerman apilados, sus conocidos.
Y hay que decirlo, el único partido que ha tratado de sacar provecho de esta situación, como si los guerrerenses fuesen idiotas para creérselos, fue Morena, nadie más. Nadie más.
La encuesta
Con dificultades y polémica en algunos estados, Morena siguió adelante con su encuesta. No parece tan sencillo, aunque todo tiene qué ver con el presidente, lo cual confirma que para él hay morenistas de primera y de segunda. Sí, aunque lo niegue.
En el caso de Veracruz, luego de la fiebre loca que le atacó por unos días, el exsecretario de gobierno, Eric Cisneros ya se ve más tranquilo, con todo y que en algunos ayuntamientos donde pisó los callos de sus alcaldes para que le apoyaran que hasta caravanas de autos hubo, ya parece resignado a que sea Rocío Nahle la candidata al gobierno.
Créalo, nadie tiene nada contra Rocío Nahle, quizá sea la forma en que ha sido escogida o apapachada por el propio presidente López, simplemente que se hubiese preferido que se aplicara un método más claro que un dedazo o una encuesta en la que nadie pareciera haber sido encuestado.
La extitular de Energía ya se reunió con empresarios de la zona de Córdoba y le pareció ir bien. Agradó, por lo menos, que aclarara que Morena no está en contra del desarrollo, muy a pesar de las palabras y sentimientos del presidente.
Nuevo encargo
Antonio Luna es, desde unos días, presidente estatal de la Asociación Política Cardenista, lo que le compromete a viajar más, reunirse con los comités locales e implementar planes para el desarrollo y buen vivir de sus afiliados.
El trabajo que ha realizado por tantos años debe rendir frutos, sin duda, debido a que hay una solidaridad plena con los que menos tienen y eso abre paso para que haya una mayor interacción y por supuesto, se instauren programas para mejorar en todos los aspectos.
Si algo se puede reflejar en las giras y el trabajo que realiza Antonio Luna, es que sus simpatizantes demandan trabajo, servicios públicos como agua, drenaje y energía eléctrica y eso es un buen motivo para seguir luchando, sin duda.
PD Aunque para muchos columnistas, la mayoría pagados, la oposición en Veracruz no existe, hay muchas cosas por hacer pero eso debe definirse ya. No es momento de ambiciones personales, es momento para unirse y trabajar por el bien de Veracruz. PAN, PRD y PRI tienen un gran trabajo por delante, pero pueden hacerlo y bien.