Ciudad de México
La Reforma al Poder Judicial va porque va, es un mandato popular y se va a aprobar, fue el mensaje fuerte y claro que envió Rosa María Hernández Espejo, quien tomó protesta como diputada federal el pasado 1 de septiembre.
La representante del municipio de Veracruz en la recién conformada Legislatura federal expresó que la toma de la Cámara por parte de trabajadores del Poder Judicial de la Federación no impedirá que se trabaje para sacar adelante la reforma del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Entrevistada vía telefónica en la Ciudad Deportiva Magdalena Mixhuca, sede elegida para desarrollar la sesión legislativa, Hernández Espejo refirió que el pueblo salió a votar por el Plan C que les propusimos en la campaña, y la primera reforma del Plan C es ésta, la del Poder Judicial de la Federación. «A nosotros sí nos puso el pueblo y nosotros vamos a obedecer al pueblo», expresó.
Los números de la elección del 2 de junio son contundentes, agregó, el pueblo ya no quiere más un Poder Judicial que obedezca intereses de grupos fácticos, de la política y del dinero e incluso de intereses extranjeros. El Poder Judicial tiene que obedecer a los intereses del Estado mexicano.
Puso como ejemplo que transnacionales como las mineras son empresas que no quieren pagar impuestos, que no quieren someterse a la ley del etiquetado, que no quieren seguir las reglas ambientales en México, están amparadas y los jueces les dan rapidísimo los amparos, mientras que a un mexicano, a un ciudadano que necesita que se le haga justicia, ésta no les llega por parte de los jueces. “Eso es lo que tenemos que ponderar y analizar los mexicanos”.
La diputada federal reiteró que la reforma va y que los trabajadores tienen a salvo sus derechos laborales y hasta salen ganando más todavía, y puntualizó: «con esta reforma un trabajador de un juzgado va a poder ser ministro de la Suprema Corte, porque se va a poder apuntar, se va a poder proponer y concursar y va a poder aspirar a ser ministro, porque su único aval va a ser el pueblo. Pero le tienen mucho miedo al pueblo y no quieren que el pueblo sea el que ponga y quite a estos servidores de la justicia, que hoy es injusticia».
Sobre la protesta expresó: «la Cámara está tomada por Trabajadores del Poder Judicial de la Federación, o al menos así se hacen llamar, trabajadores, pero sabemos que están metidos también los partidos políticos de la ultraderecha, sabemos que están metidos algunas cámaras empresariales».