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    Miguel Ángel Gómez Ruiz

    Contrapunto

    Es importante aclarar que la reforma judicial que impuso la mayoría de Morena en el Congreso de la Unión no fue por voluntad de todos los mexicanos, sino que fue en un simple afán de complacer al expresidente López, quien al parecer aún sigue gozando del poder incluso por encima de la presidente Sheinbaum.

    No existe otra explicación entonces, al servilismo de personajes de dudosa capacidad moral como Adán Augusto López, Ricardo Monreal o Fernández Noroña, al tratar de presentar todos los candados posibles para que la reforma no sea impugnada o bien, que se quede como ellos quieren, aún por encima de la Constitución del país.

    Al grupo morenista no le queda claro que no son más importantes que la Constitución del país y que no pueden cambiarla a capricho, tan sólo para complacer a un tipo que en seis años no supo qué hacer para mejorar al país, mas que mantener a todo aquél que estiró la mano incluso, dejando la dignidad a un lado.

    Ya se había visto con el expresidente López que no acató decisiones de la Suprema Corte y ahora ya está la advertencia de Sheinbaum y su pandilla de que no harán caso a las decisiones de los ministros, lo que significa que para ellos no es válida la misma Constitución.

    Pero ojo, ya se ha advertido que al no acatar una decisión de la Corte se recae en desacato y aunque a la presidente Sheinbaum no le importa ese tema quizá no se ha puesto a pensar que a nivel mundial se hable de que en México se esté imponiendo una dictadura, es cierto, quizá una dictadura muy chafa y región 4, pero no será visto con buenos ojos que un grupo de personas, con la mente muy pequeña y con una arrogancia muy oscura, se nieguen a cumplir con la ley.

    De por sí ya del país se piensa lo peor, no quedará bien parado si los morenistas siguen con su necedad de imponerse -no de mejorar al país-con sus mayorías estúpidas.

    Por otra parte, ya a un mes de que la presidente Sheinbaum asumió su cargo como presidente, el país no cambió en nada y sí, la violencia sigue imparable, muchos mexicanos no tienen dinero ni medicinas y los temas principales de la mujer son: el expresidente Felipe Calderón, el secuestro del “Mayo” Zambada y su necia petición de que España pida perdón por la Conquista. Exacto, esos temas son su prioridad, de no creerse, pero eso es lo que más le interesa, olvide usted la pobreza, los crímenes, la guerra que encabeza el narco en Sinaloa y otros estados morenistas, el desplazamiento de chiapanecos y el tema de las medicinas.

    Vaya, hablando de prioridades, la presidente ya dispuso de ayuda para la dictadura cubana, cuyos líderes gozarán de esa ayuda, pero el pueblo no y aquí, en cambio hay muchos, muchos mexicanos que requieren todo y para ellos no hay nada. Nada.

    Y esto no va a cambiar insisto, poco a poco las becas se irán quitando y otras ayudas. Quizá las devuelvan antes de los procesos electorales, pero no hay dinero para eso. Vaya, no imagino cómo debe estar de su estómago el secretario de Hacienda, pero lo compadezco, tratar de dar orden a las cuentas morenistas debe ser un reto y el más actual es imaginar cómo se cubrirá el costo de la elección de magistrados y jueces. Se calcula que se requiere un gasto de 13 mil millones de pesos para que al final -y sin temor a equivocarme- vayan 50 votantes por mesa. Es decir, no habrá una participación numerosa, lo aseguro.

    Peor aún, para elegir a un sinnúmero de idiotas quizá no se requiera tanto dinero, pero como siempre, se quieren lucir con un recurso que no les pertenece. Vaya, dejar a un lado el mantenimiento y construcción de carreteras por un tema tan burdo como la elección de jueces y magistrados provenientes del “pueblo” no será la gran cosa y a mi parecer, no se requiere de tanto dinero.

    La presidente Sheinbaum tiene muchos retos y no parece preparada para cumplir con ninguno. De hecho, ninguno de sus achichincles parece tener esa capacidad así que no queda más que persignarnos y pedir un milagro pues, insisto, nos están dirigiendo hacia un hoyo muy profundo.

    PD El tema de las medicinas es prioritario. Hasta los simpatizantes morenistas sufren. El martes fui a control médico y para recoger medicinas. El doctor del hospital me entregó una receta en la que me incluyó cinco medicamentos: Trayenta de 5 mg, Telmisartán de 80 mg, Amlodipino de 5 mg, Gabapentina de 300 mg y Vitamina B. Sólo pude recoger el Telmisartán, el resto como casi siempre, estuvo de faltante.

    Curiosamente, una señora que llevó su playera color Morena y un gafete llegó antes que yo a la farmacia del hospital. Escuché que de su receta no le entregaron más que uno de cuatro medicamentos y se puso a exigir, pero su exigencia resultó inútil. No hubo medicamentos pese a que se marchó mentando madres. Este gobierno no te garantiza tu cuidado y salud, lamentablemente.