PAN, padrón inflado y militancia compartida

Luis Alberto Romero

Hora Cero

La información difundida por el diario Rumbo de México, sobre la forma en la que fue “inflado” el padrón de militantes del Partido Acción Nacional y particularmente sobre la falta de concordancia entre los datos del Instituto Nacional Electoral y del Registro Nacional de Miembros de ese instituto político, revela prácticas irregulares pero también comunes de los partidos.

En el caso particular de Acción Nacional, es evidente no sólo la desesperación de los cuadros directivos ante el desplome en el número de militantes; sino la lucha por el poder al interior, ahora que están por definirse las candidaturas en el proceso federal electoral 2014-2015, y cuando los grupos internos se enfrentarán, el año próximo, en la lucha por la dirigencia, una vez que concluya el periodo que inició Gustavo Madero y continúa Ricardo Anaya.

En el ámbito nacional, en febrero de 2013, al concluir el proceso de actualización, refrendo y depuración del Padrón de Miembros del partido, se habló de un desplome del 80 por ciento en el número de militantes, que pasó de un millón 868 mil a menos de 389 mil, para registrar una pérdida de más de un millón 470 mil afiliados.

En ese contexto, el PAN contabilizaba en Veracruz 36 mil 300 afiliados; esta fue una de las entidades que más perdieron militantes; en 2012, Acción Nacional tuvo 173 mil miembros activos y adherentes en la entidad y un año después, para 2013, había perdido a más de 137 mil.

Entre los factores a los que la dirigencia del PAN atribuyó el desplome de militantes se encuentra el resultado electoral en el pasado proceso para elegir presidente de la República, porque el partido, con Josefina Vázquez Mota como candidata, sólo alcanzó poco más del 25 por ciento de la votación, con menos de 13 millones de sufragios.

El siguiente proceso para actualizar el padrón panista ocurrió este año: si en 2013, una militancia de 389 mil fue motivo de preocupación, para el 2014, con poco menos de 223 mil afiliados certificados, se encendieron los focos rojos dentro de ese partido.

La reducción se debió a que el Instituto Nacional Electoral detectó que 48 mil 700 afiliados al blanquiazul también estaban incluidos en los padrones de otros partidos, por lo que sus registros fueron anulados.

Con esos números, el PAN fue rebasado, en términos de militancia acreditada ante el INE, por el Movimiento de Regeneración Nacional, por el Movimiento Ciudadano y hasta por el Partido Encuentro Social.

Esa desnutrición de militantes obligó a ese partido a pisar el acelerador de la afiliación: en Veracruz, por ejemplo, en el último semestre fueron inscritos 6 mil nuevos panistas para aumentar de 36 mil a 42 mil miembros en la entidad.

Este año, el PAN ya no pudo recurrir a las prácticas que fueron comunes durante los dos sexenios en los que el partido estuvo en el poder; es decir, el uso de los programas sociales para fortalecer su estructura; y ello explica la lentitud en el proceso de inscripción de nuevos militantes; la necesidad de inflar su padrón; y el recurso de anotar como propios a quienes ya están afiliados a otros partidos. @luisromero85