Luto en la campaña, ¡hasta siempre Filósofo de Güémez!

Sughey Gutiérrez Hernández

Caminos de Veracruz… Desde la campaña

No es de piedra, tampoco de palo, es un hombre bueno, sensible, de carne y hueso. Héctor Yunes Landa se quebró en Agua Dulce al informar que este martes, en un accidente carretero, murió Ramón Durón Ruiz, mejor conocido como el Filósofo de Güémez, su coordinador de Relaciones Públicas de la campaña, su amigo y casi su hermano.
Con un nudo en la garganta el candidato de la Coalición para Mejorar Veracruz ya no pudo seguir hablando y pidió a la candidata a diputada local, Gloria Ochoa Rueda que diera su mensaje. Las lágrimas rodaron por sus mejillas, estaba notablemente consternado por la muerte de su colaborador y amigo.
Con Ramón platiqué el viernes 27 en el Foro de Comunicación Social celebrado en Boca del Río, después de mi intervención se acercó y me dijo: “Sughey, excelente tu ponencia, un buen tema el de la equidad de género en los medios, creo que es un tema en el que todos debemos trabajar, en verdad te felicito” y me regaló un respetuoso y sincero abrazo.
Coincidencias y misterios de la vida. Hace apenas unas horas, el filósofo escribió en su columna que se publica en más de cien periódicos de todo el país, algunas reflexiones sobre por qué votar a favor de Héctor Yunes, como si hubiera presentido que ya no tendría tiempo de decirlo:
“Héctor es la opción que le da viabilidad y congruencia, al supremo ejercicio de gobernar esa tierra tan generosa y hermosa llamada Veracruz (…..) es la mejor opción para Gobernador, su vida laboral, política, está llena de congruencia, es un hombre que cumple los compromisos que ofrece y honra la palabra. A mi edad es muy difícil que un político me cautive, están llenos de mañas y subterfugios verbales para engañar, creo que Héctor Yunes es la mejor opción para Gobernador, porque a diferencia de otros políticos tiene las manos limpias, un pasado intachable, está lleno de valores, de principios, de ética, no tiene cola que le pisen, tampoco doble de moral, vive en la honrada medianía, es un hombre que no se amedrenta ante los problemas, busca soluciones, tiene una visión de gran calado y estatura de miras.
Héctor no se ha enriquecido a la sombra del poder, tiene la conciencia tranquila. De sus padres Don César y Doña Sara, aprendió a ser un hombre de bien, no le tiembla la mano para enfrentar la impunidad y hacer que el estado de derecho se respete, es el líder honesto, con mano firme, que Veracruz, necesita para construir historias de éxitos.
Junto a su carismática compañera de vida, su esposa Verónica de la Medina de Yunes, son cabeza de una hermosa familia, basada en los principios morales que se aprendieron en casa”.
Así escribió el filósofo de Güémez del priista que hoy llora su lamentable e irreparable pérdida. En efecto, Ramón era un hombre Maduro, inteligente y con mucha experiencia al que no se podía impresionar tan fácilmente y él veía grandes virtudes en el aspirante a gobernar Veracruz, ojalá que el próximo domingo miles vean esos mismos atributos..
Desde este modesto espacio, me sumo al cúmulo de condolencias para la familia de Ramón Durón y les mando un fraternal abrazo. La campaña de Héctor y el periodismo nacional están de luto, descanse en paz el Filósofo de Güémez.