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    Salvador Muñoz

    Los Políticos

     

    Diez puntos que pudiera considerarse como un primer paso es el que da un militante del PRI ahora que hizo ruido la posibilidad de que el Revolucionario Institucional cambie de nombre. En torno a un café, quien fuera presidente del tricolor en Veracruz, Renato Alarcón Guevara, no le hace feo a un “bautizo” para el otrora partidazo, aunque antes de pensar en ello, expone algunas reflexiones que enumeramos y que es seguro, a muchos militantes agrade pero haya más a quien incomode… ¡ai se verá!

     

    ¿A quién representar?

    Renato expone que antes que nada, se debe definir cuál va a ser el espectro ideológico del partido, “porque si queremos ser un partido de izquierda, de reivindicación social y libertades ¡no tenemos nada que hacer! ese espacio ya lo cubrió Morena…”.

    –Si no es izquierda, ¿derecha o centro?

    –Creo que debemos mantenernos como un partido político de centro… con posiciones claras en los temas nacionales e incluso más polémicos…

    –¿Ejemplo?

    –El aborto: no estar en contra, pero regular cuáles son los casos en los que debe aceptarse pero sobre todo, despenalizarlo sin renunciar a regularlo… sólo como ejemplo… otro escenario puede ser el apostar al libre Mercado sin hacer a un lado nuestro compromiso de un Estado fuerte y tutelar (La Tercera Vía de Anthony Giddens)…

    En conclusión, comenta Renato Alarcón, lo primero que hay que definir es qué queremos representar… y a quiénes…

    En un momento dado, como segundo punto, Renato Alarcón sí estaría de acuerdo en cambiar la ya conocida imagen del PRI que va desde los colores, logo, nombre y demás, pero antecedido por el punto 1 y los consiguientes.

    Adiós a las Vacas Sagradas

    Un tercer punto que de seguro a muchos a los que les quede el saco, se van a incomodar: La sentencia de Renato es clara cuando dice que las vacas sagradas deben dejar el espacio a cuadros menos conocidos en el espectro nacional… ¡y por tanto, menos quemados! ¿De qué se trata? de formar un comité nacional a partir de cuadros locales que puedan aportar una visión territorial…

    Aunque se inclina por el centro, Renato Alarcón considera que en el cuarto punto, hay que estar cerca de la derecha (empresarios e iglesia), aunque precisa y enfatiza: “sin volvernos parte de ella…”

    Duartistas: Sí, pero no

    Y si el tercer punto pudiera causar escozor, el quinto, ¡ni se diga! Más cuando Alarcón Guevara considera que hay que buscar la reconciliación antes que nada, hacia el interior pero tomando medidas drásticas, al menos en lo que respecta a Veracruz, sobre ciertos actores políticos: “si nuestro nuevo partido, en el caso de Veracruz, lo encabezan los  actores políticos del Duartismo con un desgaste de imagen ¡estamos jodidos de inicio! Debemos pedirles prudencia… que militen (si quieren) pero que no aparezcan…”

    Por supuesto, el espectro del punto 5 alcanza en determinado momento al Sexto, cuando el ex dirigente del PRI considera que los sectores y organizaciones deben desaparecer como pilares del sostenimiento partidista… “que existan, que se sumen si quieren, ¡pero que ya no secuestren al partido!”

    Considera que en pleno siglo 21 no hay cabida para un partido monolítico de sectores y organizaciones.

    Regidores, la base

    En el Séptimo punto, a sabiendas de que las prerrogativas ya no serán las del otrora Partidazo, se tiene que resolver la interrogante básica: “¿De que vamos a vivir… dinero… recursos… apoyos…”

    Un punto básico si se quiere refundar al partido, es hacerlo de abajo para arriba y consolidar una fuerza con los representantes populares que en estos momentos son mayoría en el partido: Los regidores. Por ello, propone Renato Alarcón en el punto 8, que sean ellos los que conformen la base a través de su opinión en la refundación del nuevo partido… “el representante popular más cercano a la militancia son los regidores”.

    Y otra indirecta que la puede cachar al que le quede el saco, está en el noveno punto: no se vale que quien que ya se fue, quiera volver a ser o encabezar en el nuevo partido…

    ¿Y los Yunes?

    Enfocado en el priísmo veracruzano, resume el décimo punto con dos figuras que han sido singulares y esenciales al menos en las tres últimas elecciones: Héctor y Pepe Yunes. Pide su participación de manera activa “pero que se abran tantito… su dicotomía, sus falsos acuerdos y sus patadas por debajo de la mesa (además de la herencia del pasado) es lo nos tiene así…”

    Para completar estos diez mandamientos, son básicos dos ejercicios a realizar por quienes participen en la refundación del partido: Reflexión y prudencia… “no hay que tirar culpas a diestra y siniestra…. todos somos responsables… el amor es poco para desperdiciarlo en celos”.

     

    smcainito@gmail.com

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