Crónicas de cuarentena

Roberto Sánchez Escalante
En el COSTA LUMINOSA todo transcurre en calma, la atención del mando, la oficialidad y la tripulación es excelente, nos proporcionan tres muy buenas cómidas calientes al día, ofrecen café hielo y bebidas enlatadas con regularidad.
Quienes tenemos balcón en el camarote podemos tomar aire fresco y sol sin limitaciones.
Jugamos cartas, vemos la televisión y hacemos crucigramas.
Por experiencias anteriores sabemos de las limitaciones de la programación televisiva, por lo que previendolo descargamos películas y series en la aplicación comercial más popular y conocida, “nunca antes valore como ahora a NETFLIX”
Se nos informa con cierta frecuencia sobre el estado que guardan las negociaciones con el gobierno francés para la repatriación desde Marsella de los pasajeros NO ITALIANOS, quienes desembarcarán en Savona, puerto cercano a Palos y Génova.
No hay pánico, se procura a la pareja interactuando con amor y paciencia, surge un espíritu protector poco conocido, crece la preocupación por los hijos y se agradecen las comunicaciones por face time de los nietos, la gran motivación de nuestras vidas.
La fe, la esperanza y el deseo de vivir crecen de manera inusitada, se valora, se aprecia se piensa se evoca en coordinación perfecta de mente cuerpo alma y espíritu.
Se agradecen las bendiciones, se extraña, se perdona, se ora, se teme, se añora.