Avryl Castelán Martínez *
Han notado que hasta un comentario mal interpretado puede ser causa de un conflicto, sumado a nuestra incapacidad en estos tiempos en tener empatía para resolver los problemas por más simples que parezcan y esto suele ser caótico… y así viene a mi mente España-Cataluña.
Por supuesto, es lo más sonado, pero existen más conflictos; por ejemplo, en nuestro mismo país, pero éste yo no lo entendía muy bien y como siempre, en la mayoría de las veces es por economía (dinero), que si quien da más, quien hace menos, etcétera: pero el fondo de éste era otro…
Ayer veía en un taller tres formas de enfrentar ciertas situaciones (3 Personalidades)
1.- Pasiva
2.- Acertiva
3.- Flemática
Y vi cómo nos hace falta ver todo desde un punto de vista más humanista, respetando a todos y aprendiendo a compartir.
Analizando, existen heridas, principalmente de nuestros antepasados (que ni conocemos, por ejemplo: por qué tenemos que odiar a otros o tomar una postura sólo porque así debe ser) que se heredan (esto no debería ser así), que muchas veces mueven a la gente de manera individual o a las masas a actuar radicalmente. También podemos comparar los conflictos como las enfermedades genéticas, que son transmitidas y provocadas por generaciones y así esto se propaga y se prolonga.
En mi caso observo y escucho mucho que debemos ser de una manera, porque así lo hacían nuestros padres y nuestros abuelos, y yo creo que nos corresponde hacerlo a nuestra manera, de acuerdo a nuestra época, con respeto de lo anterior, tomando las bases y lo bueno de lo que ya está y ya fue, pero siempre con valores y virtudes presentes; entonces considero que el aprendizaje de cada generación es diferente.
La sociedad y la gente a nuestro alrededor nos empuja a actuar de determinadas formas, las más de las veces a su conveniencia y movida por intereses, y eso nos impide a vivir con autenticidad.
Debemos ser auténticos… únicos… no debe de haber imposición en este mundo pues mucha gente actúa por imitación. A mí me han enseñado lo contrario, por ejemplo, he visto en algunas marchas (que me lleva mi papá) en donde se le exige algo al Gobierno y al 60% de las personas les preguntas y no saben el porqué realmente están ahí, pero están. En los pasados desastres, muchos de los que ayudan era Ego protagonismo, ser reconocidos como Buenos (probablemente porque algo hicieron mal en su vida) y después viene el aprovechamiento, estoy segura que no saben el fin y tampoco el sentimiento de quien realmente lo padeció.
Recientemente leí dos artículos bastante coherentes y que me dieron más claridad para entender lo que pasa en España.
Uno explicaba cómo había empezado este conflicto cuando después de unirse el Conde de Barcelona con la Reina de Aragón formaron la Corona de Aragón y más tarde la Corona de Castilla, donde se constituyó casi lo que hoy conocemos como España, y justo después surge el conflicto al querer prohibir una lengua, el empezar a meterse con costumbres, el no respetar las ideología. Y cuando Felipe V en una sucesión vence a Carlos III de Cataluña y por ser una zona opositora y con un desarrollo ideológico, lo somete y limita; sin embargo, el valor de la estirpe catalana siempre los llevó a defender y resistir el ataque a sus raíces con valentía, pero hubo algo que se heredó con más fuerza de ambos lados: la furia, ira y rencor entre un clan y otro… El otro artículo se centraba en ver soluciones a este conflicto; mencionaba que ninguna proclamación de la nueva República Catalana de forma arbitraria, ni una represión de fuerzas violentas y armadas en las calles por parte del Gobierno es la solución, puesto que hay algo que no se está resolviendo: los resentimientos, el enojo del que pierde, la euforia del que gana, esto genera sentimientos de Venganza, de crítica, de intolerancia…
Para mí, el fin está en sanar y ser feliz individualmente; vivir en paz pero desde el interior e irradiarlo al exterior, ¡uf! algo tan difícil, pero esto lo he aprendido en el Kung Fu que practico desde los 3 años… ¡ya sé! iré a ver mis apuntes… recuerdo una frase para esto. Tengo una libreta en donde anoto frases de mi Maestro de Kung Fu (sí, mi papá). Encontré lo siguiente que habla sobre el trabajo interior para después desarrollarlo afuera, o sea, a los demás: “Para amar a los demás, primero debes amarte a ti mismo”; entonces, cómo puedes pedir paz, calma o cualquier cosa, si no la tienes tú; sucede lo mismo en estos conflictos en donde sólo alimentamos nuestro orgullo, nuestro ego, nuestra postura (que para nosotros es la única que está bien)…
El mundo que hemos creado nos consume y vibra muchas de las veces lleno de incertidumbre. A mí, como niña, me preocupa, porque aunque no hay que pensar en lo negativo, actualmente está muy presente porque no lo combatimos, queremos hacernos como que no existe y eso no soluciona nada.
Es como la historia, es interesante para conocer cómo era la vida antes en cada lugar de la tierra, pero no hay que vivir pegado a ella, además de que nos cuentan lo que quieren y les conviene, siempre sus villanos y sus héroes, siendo que todos podemos tener actos que nos hagan ser héroes o villanos. Me viene a la mente una caricatura, Avatar, la leyenda de Ang, el último Maestro del Aire, del Libro 1, el capítulo El cañón de la Muerte, en donde 2 clanes enemigos de la Tribu Tierra tienen que cruzar ese Cañón y el Avatar se encuentra en medio del conflicto ya que uno de los líderes se lesiona y el otro clan se niega a ayudarlo y hasta se alegra, debido a Historias que generaron rencores heredados, pero en sí, ninguno los puede explicar con certeza pues ocurrieron hace más de 100 años, pero como el protagonista (el Avatar) tiene más de 100 años les dice que él se acuerda qué pasó en realidad y que no fue nada grave, que además había sido cuando eran niños. Al escuchar la historia, todos se apenan de los rencores hacia quienes ni siquiera se habían dado la oportunidad de conocer y ayudan al otro clan y conviven y reconocen valores en los otros. Después, el Avatar les dice a sus amigos ya en privado que lo que les contó a los dos clanes es mentira pero que cambiarles el panorama y hacerlos pensar de manera que pudieran convivir en Armonía poco a poco con recuerdos más llenos de paz y convivencia que de rencor y odio, ayuda a mejorar las cosas, a estar trayendo del pasado los recuerdos que sólo hieren…
Espero que cada día nos rodeemos de gente más consciente y las cuales nos dirijan a un mundo más armónico. Yo estoy a favor de la paz en todo el mundo y deseo desde el fondo de mi corazón que España y Cataluña se lleven bien y resuelvan las cosas de la manera más civilizada posible, que sanen y ya no hereden soberbias y orgullos tontos…
La tarea del ser humano es que con amor, armonía, comprensión y respeto aprendamos a convivir, convivir, convivir…
* Avryl Castelán Martínez, con 11 años de edad, es la más joven de los colaboradores de “Los Políticos”. A través de sus cuentos y de su opinión, nos permite ver y conocer otra perspectiva de nuestra realidad, a veces tan empañada por tantos sucesos funestos. Avryl participó en el libro “Historias de niñas extraordinarias” editado con el apoyo del Instituto Municipal de las Mujeres, Xalapa.
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